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Ya hemos comentado en anteriores post la importancia de seguir una rutina de ejercicio físico en verano. Pese a todo, somos conscientes de que la pereza muchas veces juega malas pasadas y evita que tengamos una rutina correcta. Hoy os proponemos un ejercicio muy veraniego y saludable: correr por la playa.
Correr por la playa tiene múltiples beneficios ya que por ejemplo nuestro impacto articular se ve reducido ya que las articulaciones no sufren tanto gracias al impacto con la arena. Además, conlleva un gasto calórico superior y un mayor consumo de grasa que correr por el asfalto.
Correr por la playa mejora nuestra estabilidad y nuestro equilibrio ya que gracias a este ejercicio desarrollamos una serie de habilidades al correr por una superficie más irregular como lo es la arena. En suma, es una actividad física que previene lesiones relacionadas con los músculos, los tendones, los ligamentos y las articulaciones.
Ante este ejercicio tan saludable queremos haceros una serie de recomendaciones a tener en cuenta.
Primero que todo no es conveniente planificar una sesiones de ejercicio largas ya que correr por la playa es más complicado que por el asfalto. Además debes tener en cuenta que se pueden generar lesiones en los talones y los tobillos.
Por otro lado debes evitar las horas en las que los rayos solares son más fuertes, es por esto que lo mejor será que entrenes a primera hora de la mañana o a última de la tarde, siempre teniendo en cuenta que es mejor que te expongas al sol de una forma moderada.
Para finalizar tu sesión de ejercicio físico lo mejor que puedes hacer es darte un baño en el mar.
Desde luego correr por la playa es uno de los ejercicios más saludables que puedes hacer en esta época estival. Combina el ejercicio con una dieta equilibrada y con ajustes quiroprácticos regulares. ¡No lo dudes! Running, running, running.
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