Nuestra paciente Carol nos hace la siguiente pregunta: "mi madre tiene artrosis de rodilla y tengo miedo de padecer yo también el mismo problema cuando sea más mayor. ¿Tengo que cambiar mi alimentación? ¿Puedo hacer deporte? ¿Qué debo hacer para no padecer artrosis de rodilla?

La artrosis de rodilla

La artrosis es una afección inflamatoria del cartílago, tejido que protege la extremidad de los huesos.

Muchas personas piensan que la artrosis es el desgaste de la articulación. Pero no es así, un estudio de Medicine & Science in Sports & Exercis demuestra lo contrario, un corredor tiene 50% menos de riesgos de desarrollar artrosis de rodilla o de cadera.

Un estudio de National Runners’ Health Study hecho sobre 90000 corredores no muestra ningún aumento de artrosis, incluyendo en dicho estudio a corredores de más de 100km por semana.

El cartílago no está nutrido por la sangre, pero sí por el líquido que se encuentra dentro de la articulación (líquido sinovial). Si la articulación se mueve, el líquido fluye correctamente y el cartílago está bien nutrido. Si no te mueves, el cartílago se morirá, de falta de movimiento y de hambre.

Factores que favorecen la artrosis de rodilla:

Sobrepeso

Es cierto que cuando una persona pesa más las rodillas trabajarán más, pudiendo desarrollar más artrosis de rodilla. Pero teniendo más grasa (sobre todo grasa abdominal) el cuerpo libera hormonas inflamatorias que paran el proceso de regeneración del cartílago de todo el cuerpo, ¡incluso en las manos!

Riesgo familiar

Si hay personas en tu familia que tienen artrosis de rodilla debes hacer ejercicio y controlar tu peso para disminuir tus riesgos.

Lesiones de articulaciones

Los choques violentos, lesiones (de tendón, ligamentos o meniscos) u operaciones de articulaciones aumentan el riesgo de artrosis de rodilla. Se debe por lo tanto ser prudente con el fútbol o el esquí o todos los deportes con impactos demasiado fuertes y aumentar la práctica de ciclismo, el running o la marcha.

Tener una mala postura

Tener una buena postura, bien erguido, sentado o de  pie protege las articulaciones de arriba abajo.

Alimentación e intolerancias alimentarias

Si sufres de inflamación crónica, o te duelen varias articulaciones o tienes artrosis en varios sitios, tienes que vigilar tu alimentación.

La leche de vaca y el gluten de los cereales no son alimentos que el ser humano tolere demasiado. Cuando los ingerimos el cuerpo contesta con una reacción autoinmune que va a destrozar su propio cartílago.

También debes evitar dejar demasiado tiempo la comida en la parrilla o la plancha. Favorecer la cocina al vapor o a baja temperatura o si se puede, comer crudo.

Debes incluir en tu dieta más omega 3,  jengibre y cúrcuma. También mucha fruta y verdura que contienen antoxidantes o ir a un naturopata que suele recetar harpagofito, glucosamina o condroitina.

Las termas y balnearios

No olvides que antiguamente la gente solía hacer curas en termas, aunque ahora se hace mucho menos. El agua de los balnearios suele bajar la inflamación de las articulaciones y depurar el cuerpo.

Medicina convencional

Un estudio en Oslo sobre 186 pacientes enseñó que los que tomaban un antiinflamatorio no esteroideo (aine) sufrían un deterioro mucho más rápido de sus caderas que los que no lo tomaban, además de ser peligroso por el estomago si lo tomas a largo plazo.

El ibuprofeno puede aliviar el dolor en las primeras semanas pero suelen ser peor después de 8 semanas de tratamiento. Estudio del doctor Antonio Lopez Vaz, del hospital de Oporto, Portugal.

¿Cómo me puede ayudar la quiropráctica con la artosis de rodilla?

Uno de los propósitos de la quiropráctica es mantener una buena movilidad de la columna vertebral. Así el sistema nervioso puede fluir sin interferencias a través todo el cuerpo.

Muy a menudo la gente tiene artrosis más pronunciada en una rodilla o en un lado de la cadera sin saber por qué. En la mayoría de las ocasiones no hay antecedentes pero después de un examen profundo nos damos cuenta que no carga el peso del cuerpo igual en las 2 piernas. Si eso persiste varios años, las articulaciones de esta pierna se degenerarán con más velocidad que en la otra y desarrollará artrosis. Con una columna ajustada y una pelvis bien equilibrada, se puede recuperar esta descompensación y una postura correcta.

Los ajustes quiroprácticos permiten recuperar movimientos articulares homogéneos y un cuerpo con su plena capacidad. Que sea en las piernas o en la columna es una condición esencial para parar de sufrir o prevenir de la artrosis.